Es un hecho que hoy en día cualquier relación con una empresa, o incluso con la administración pública, esta orientada a ser llevada a cabo a través de medios telemáticos. Es por esto que se hace necesario reducir la brecha digital existente para que el ciudadano pueda acceder a estos servicios de una manera satisfactoria.
La brecha digital produce una exclusión social, ya que las personas que no pueden tener acceso a los productos ofertados de manera digital, están perdiendo un gran porcentaje de posibilidades de relacionarse con las empresas y administraciones, o directamente impidiéndoselo.
Dicha brecha digital puede venir dada, bien por componentes socioeconómicos, o bien por la falta de Competencias Digitales Básicas. Desde la Unión Europea, y las Administraciones Publicas, se fomentan las acciones formativas que puedan mitigar estas últimas, subvencionando ciertos cursos que pueden aportar a los ciudadanos los conocimientos mínimos para desenvolverse en ellas.
Desde luego la digitalización se ha instaurado en nuestra sociedad y será conveniente adaptarse a ella para poder resolver todas nuestras necesidades, ya que es seguro que no va a haber ningún paso hacia atrás en este proceso.